Empieza el llanto de la guitarra. […]
 Llora monótona como llora el agua, 
 como llora el viento sobre la nevada.
 Es imposible callarla. […]
 Llora por cosas lejanas.
 Arena del Sur caliente que pide camelias blancas.
 [...] ¡Oh guitarra!
 Corazón malherido por cinco espadas.
 
Federico García Lorca, El poema del Cante Jondo, 1921.